UN CALENDARIO DE ADVIENTO ESPECIAL

Ya a mediados de Noviembre me empieza a entrar una sensación que me encanta, siento que la Navidad se acerca. Antes de esta fecha no, a pesar de que muchos establecimientos se empeñan en poner turrones y adornos de Navidad a mediados de Octubre, antes de Halloween, y antes de mi cumpleaños. No me gusta eso, la verdad.

 Sin embargo, a partir del 21 de Noviembre empiezo a poner poco a poco decoración navideña con mi nena y a hacer manualidades inspiradas en estas fiestas.

 Con el Adviento empieza el primer período del año litúrgico de la Iglesia. En este período, que comprende los 4 Domingos previos a la Navidad, los cristianos se prepararan espiritualmente para el nacimiento del Señor. En la Iglesia Ortodoxa, el Adviento es del 28 de Noviembre al 6 de enero, y se produce el ayuno de la Natividad, con la restricción de ciertos alimentos.

 En las Iglesias y muchas casas se coloca la Corona de Adviento, con 4 velas que representan los 4 domingos previos a la fiesta de la Natividad, y se enciende una vela cada Domingo que pasa. 

 El Calendario de Adviento es una cuenta atrás desde el 1 al 24 de Diciembre, creado sobre todo para los más peques de la casa. En él, se suelen poner sorpresitas para cada día que pasa. Se cree que su origen es en Alemania,en el siglo XIX, cuando los niños encendían una velita por cada día que pasaba del Adviento.

 Desde pequeña he tenido calendarios de Adviento, pero no hechos por mí, sino de los que venden de cartón con figuritas de chocolate dentro. Me los compraba mi madre y me encantaba saber lo poco que faltaba para Navidad. Ya de mayor me los dejó de comprar y siguió su costumbre con mis sobrinos, los mayores ya tienen 18 años, y con mi nena.

 Sin embargo, desde que tengo a mi hija, hago yo los calendarios con ella. A medida que va creciendo, nos vamos esmerando más, porque ella es más hábil con las manualidades.

 Este año, decidí hacerlo con las nueces que teníamos en casa. 

 Primero, las vacié, utilizando una abrenueces, no un cascanueces, para no romper las cáscaras.

 Una vez vacías, las llené con chocolatines y las volví a cerrar. Encajan muy bien las cáscaras.

 A continuación, las até con cordoncitos de colores, Baker´s Twine, en rojo-blanco, rosa-verde y rojo-rosa. De este modo, quedan cerradas de nuevo. Dejé un tramo de cordón libre para poner las estrellas con los números correspondientes a los días, del 1 al 24.

 Las estrellas las hice con una troqueladora. Unas las hice con cartulina decorada con muñecos de nieve, procurando que las caritas de los muñecos quedaran dentro de la estrella. Las otras las hice con cartulina decorada con copos de nieve. En estas escribí los números.

 Luego, con pegamento, las pegué en el cordón de las nueces. Por detrás quedan las caritas de muñecos de nieve, por delante, los números.

 Finalmente, colgué cada nuez con pinzas de madera pequeñas a una cinta de cuadritos de vichy roja y blanca.

 Todos los productos que utilicé, excepto las nueces y los chocolates, los podéis conseguir en:

 Delipapel: http://delipapel.com/

 De azul turquesa: http://www.deazulturquesa.es/

 La Caravana Rosa: http://www.lacaravanarosa.com/

 A mi nena le encanta cómo ha quedado. Le da mucha alegría agarrar una nuez por la mañana, abrirla y encontrar la sorpresita.

Con las nueces peladas, hicimos un bizcocho de zanahoria. Os pondré la recetilla en el blog.

Espero que os haya gustado.

Teresa Gil.